La Técnica Alexander es un método de aprendizaje que trabaja para facilitar el equilibrio de la persona en relación con su cuerpo y su mente, con una mirada integradora.
De pequeños disponemos de una coordinación postural y motriz natural, qué a lo largo de los años tiende a disminuir.
Frente a situaciones concretas –estrés, ansiedad, miedo, presión, etc.–, respondemos con una reacción corporal personal que solemos repetir, originando así, nuestro patrón reactivo de uso habitual.
Al cabo de un tiempo, incorporamos tales patrones que nos resultan familiares, y como consecuencia creamos un mal hábito que perjudica nuestra coordinación postural y motriz natural.
La técnica, desarrollada a finales del siglo XIX por el australiano Frederick Matthias Alexander, nos enseña a parar y prestar atención para entender cómo realizamos un movimiento.
«La Técnica Alexander es atención sin tensión»
El tiempo y la observación atenta nos permite ser conscientes de como optimitzar nuestro uso y la cantidad de energia que necessitamos en cada una de nuestras actividades.
Como resultado la Técnica Alexander nos genera bienestar, nos facilita calma y serenidad. Aquieta nuestros pensamientos y nos ofrece estabilidad física y mental.